PALACIO DE LOS CONDES DE GUARA.- Saliendo desde la Plaza de San Pedro el Viejo y pasando por la del Mercado, bajamos por la Costanilla de Villahermosa y a mano derecha nos encontramos con esta casa que ha sido adquirida por la Obra Social de Ibercaja y que se ha restaurado según proyecto encargado al arquitecto oscense Eduardo Cuello, y en el que reside el Centro de Formación de dicha entidad bancaria. Del Siglo XVII, se inserta en el casco antiguo de la ciudad. Su fachada principal se abre a un amplio espacio que le realza. La entrada principal es un gran arco de medio punto y en su interior conserva la traza de su escalera imperial. Su imagen exterior representa la tipología de palacio aragonés con su fachada de ladrillo en tres plantas con una leve imposta para separar la ordenada galería de arcos doblados como remate del alero.
Atravesando las Cuatro Esquinas llegamos al:
PALACIO DE LA DIPUTACIóN PROVINCIAL DE HUESCA.- Obra de Ramón Artigues y Ramón Sanabria, realizada en 1986-88, es característico de la nueva arquitectura, que reinterpreta la estructura porticada de la calle y traza su fachada principal según pautas visuales clásicas. Su interior ofrece una gran salón de entrada, y salas como la de Saura en la que pintó su techo con la obra “Elegía”, así como otra de exposiciones con sus restos romanos conservados y a la vista; y el Salón de actos con capacidad para doscientas personas; por la escalera lateral subimos a la primera planta con salón para los diputados; y otras dependencias para oficinas.
PLAZA DE NAVARRA.- Dicho espacio urbano constituye un conjunto monumental con la fuente de las Musas en su centro, el edificio del Círculo Oscense, los edificios de Multicaja, el Banesto y el Banco de Santander, el de la Delegación de Hacienda, y el de la “Granja Anita”, la Telefónica, la iglesia de Santa Teresa y la Casa Retortillo.
La Fuente de las Musas data de 1885, diseñada por Federico Villasante y esculpida por Enrique Blondeau, es un conjunto ornamental de carácter clasicista, circular, compuesta en piedra por un vaso con pedestal central sobre el que va a situarse la pieza escultórica de hierro fundido y ejecutada por A. Durenne. Se disbribuye en dos cuerpos superpuestos separados por un plano configurado por cuatro amplias conchas voladas, y en forma ascendente con figuras exentas y mascarones adosados en torno a su núcleo central.
El Círculo Oscense o Casino de la ciudad se realizó de 1901 a 1904 por Ildefonso Bonells Rexarch con una amplia terraza muy funcional y lúdica mirando a la plaza. Su arquitectura modernista supone un entronque con su tiempo y con el empuje de la burguesía de principios de siglo. Su traza con cuatro torreones octogonales semeja un palacio francés de estilo secesionista por su forma y ornamento. Su composición con cuerpo central adelantado y una esmerada labor de sus artesanías (como la de su magnífica puerta de madera labrada por el carpintero Francisco Arnal) en forja resalta este relevante conjunto.
Retranqueada por unos edificios modernos que la flanquean se encuentra la
IGLESIA DE SANTA TERESA, antiguo convento que fue dejado y hoy vuelve a tener función religiosa y social gracias a los frailes que lo han vuelto a habitar, después de ser restaurada su iglesia y claustro. Fábrica de 1641 a 1704 realizada por Juan Puente y Juan Nadal es una sencilla iglesia barroca, parecida a la de las Capuchinas en el Coso Alto; con su fachada de ladrillo, de planta en cruz latina y tres tramos, crucero y capilla mayor, cubierto por cúpula ciega sobre pechinas; y la nave, ábside y brazos del crucero con bóveda de lunetos. Al exterior ofrece una entrada adintelada, rematada por frontón curvo partido con una hornacina en su centro y placas resaltadas a los lados. Su fachada está flanqueada por pilastras y rematada por un frontón triangular con óculo en el centro.
Destaca asimismo el
edificio de la Delegación de Hacienda de estilo historicista construido en 1927; y los tres que ocupan la acera contraria al Casino que se les conoce por edificio del Banco Santander (1878 – 88); edificio del Banesto (1888 – 1902) y el de Multicaja (1883), todos ellos restaurados y reformados para usos actuales.
La salida de la Plaza de Navarra nos lleva por una Avenida al
Parque Miguel Servet donde podremos apreciar una variedad florística y una diversidad monumental de esculturas que ornamentan este espacio de ocio y descanso a la vez que constituye el pulmón de la ciudad.
Por la Avenida lateral al Parque podremos observar
varias casas o chalets racionalistas entre las que destacan ocho utilizadas por diversos colectivos en sus distintas actividades o útiles para vivienda privada como lo fueron inicialmente. Fueron realizadas por el arquitecto Bruno Farina González Novelles entre los años 1929 – 1930. Son los edificios actuales del Instituto de Estudios Altoaragoneses (IEA), la sede del Colegio de Arquitectos, la sede de Comisiones Obreras; y los otros cinco son viviendas particulares. Todas poseen comunes características: tipología de palacetes urbanos, escala proporcionada, siguen pautas eclécticas, adaptan chaflanes con miradores poligonales, marquesinas salientes, molduras ornamentales, formas clásicas y mixtilíneas, pórticos columnados, torres alguna con chapitel, balcones abalaustrados, simetrías en vanos, molduras, miradores,...